Las compañías pueden, por ejemplo, aprovechar los procesos de inducción para reforzar los puntos débiles de sus nuevos colaboradores. En algunas empresas chilenas, según Diario Financiero, “el coaching y capacitaciones a los líderes se ha transformado en un aliado para alinear objetivos y mejorar el clima laboral”.

Las empresas deben prepararse para recibir a quienes se reintegran al mundo del trabajo luego de ver su situación laboral afectada por la pandemia. Ello les permitirá asegurar su funcionamiento y crecimiento y, por otra parte, facilitar el acceso de esas personas a nuevos empleos, uno de los pilares de la reactivación de las economías.

Kelly Palmer, directora de aprendizaje y talento de Degreed, escribió un artículo para MIT Sloan Management Review en el que entrega tres consejos para reducir esta brecha de habilidades entre quienes se reincorporen al mercado laboral. Además, repasamos qué han hecho algunas empresas chilenas que según Diario Financiero, se han propuesto “mejorar los liderazgos para enfrentar tiempos de crisis”.

Herramientas: accesibles y simples

Un paso dado por las empresas fue habilitar programas y plataformas online para que los desempleados puedan capacitarse, como lo hizo Microsoft. Pero también se debe considerar que no todas las habilidades requeridas son cubiertas por recursos gratuitos, por lo que puede ser necesario ofrecer herramientas propias a sus nuevas contrataciones.

Otro factor destacado por Palmer es que el aprendizaje online ha demostrado tener limitaciones, como “el requisito previo de habilidades digitales adecuadas, equipo informático y acceso a internet para realizar la capacitación en línea”, según reveló un estudio de la OCDE. Para compensar ello, “es bueno crear un espacio donde las personas puedan usar herramientas de aprendizaje en el sitio, cuando sea posible”.

De esta forma, la ejecutiva de Degreed destaca que “el aprendizaje en línea puede ayudar a las personas a repasar las habilidades técnicas y también a desarrollar power skills conectando a los usuarios con otros estudiantes y sugiriendo tareas que requieren práctica con personas reales”.

Reintroducción

Los procesos de inducción ofrecen una oportunidad para incorporar el aprendizaje requerido para cerrar la brecha de habilidades.

“A menudo, cuando las empresas despiden a los empleados, les ofrecen tiempo y recursos para intentar encontrar otro trabajo. Piense en esto como lo contrario. Asegúrese de que los empleados que regresan tengan tiempo dentro de su trabajo no solo para el aprendizaje en línea, sino también para la capacitación de colegas dentro de la empresa”, propone Palmer.

Ello se puede complementar con la recontratación de empleados que fueron despedidos por la crisis económica, quienes pueden capacitar a compañeros nuevos. “Al enseñar una habilidad, los empleados recuerdan y refuerzan su propia experiencia”.

Proyectos

El trabajo en proyectos que requieran de equipos de varias áreas da la posibilidad de que los trabajadores aprendan de sus compañeros. “Haga que trabajen juntos, brindándose comentarios útiles durante el proceso. Este tipo de proyectos también benefician a los nuevos empleados, ayudándoles a conocer a más personas y aprender más sobre cómo opera la organización”, detalla Palmer.

Añade que si bien este tipo de trabajo se pueda ejecutar virtualmente o en persona, lo importante es que se considere tiempo para que los participantes puedan conversar. “Es una oportunidad para reconstruir las power skills colaborativas mientras ponen las habilidades técnicas en uso para un objetivo común”.

¿Y qué pasa en Chile?

En nuestro país este tema no ha pasado desapercibido para algunas compañías. En algunas de ellas, según Diario Financiero, “el coaching y capacitaciones a los líderes se ha transformado en un aliado para alinear objetivos y mejorar el clima laboral”.

El foco ha estado en el fomento del liderazgo y la comunicación, y estos proyectos han abarcado a mandos medios y “segundas líneas”.

Como ejemplo, el medio cita el caso de Masisa. Según su gerenta de capital humano y comunicación interna, Zoraida Cabrera, la empresa impulsó una escuela de líderes para capacitar “en nuevas habilidades y comportamientos, generando decisiones personales y genuinas de cambios, hacia un nuevo estilo de liderazgo, reajustando capacidades y valores profesionales, desarrollando nuevas competencias para acompañar a los equipos”.

Respecto del coaching, Pilar Ugarte, gerente de personas y canal presencial de Servipag, explicó al periódico que “nos ha ayudado a fortalecer la confianza hacia los líderes, y nos ha permitido poder detectar a tiempo situaciones de colaboradores que requieren de apoyo. También hemos podido brindar contención y entregar herramientas para el manejo de la angustia, incertidumbre y bienestar emocional”.

Otras empresas destacadas en el reportaje fueron CBRE, Iconstruye y Molymet.

A medida que las empresas empiecen a superar lo peor de la pandemia, dar un espacio formal para que sus personas se desarrollen representa un nuevo comienzo para ellas.