La entrega de feedback, el fomento de la confianza, el desarrollo de “rituales”, la gestión de los errores y pedir ayuda se sumarán a una serie de nuevos aprendizajes que te demandarán paciencia y práctica para crecer en tu carrera profesional.

Y la oportunidad llegó: has sido contratado, por primera vez, como gerente. Acabas de dar un paso importante en tu trayectoria. Para avanzar en esta transición, a continuación te resumimos cinco consejos que Harvard Business Review entrega a los gerentes primerizos.

Feedback

Este rol implica asumir nuevos retos y responsabilidades, pero que no te deben forzar a descuidar la entrega de feedback desde un inicio. Como plantea Rakshitha Arni Ravishankar, la autora del texto, “un buen gerente significa estar abierto a la retroalimentación en todo momento”.

¿Cómo hacerlo? Parte por agendar reuniones personales periódicas con los integrantes de tu equipo para “asegurar una comunicación abierta y honesta”. Debe ser de tu interés explorar temas como cuáles son los desafíos que cada uno enfrenta en su rol, o qué puedes hacer tú para mejorar como jefe.

En concreto, puedes partir con estas preguntas:

  • “¿Soy claro en las expectativas que establezco?”
  • “¿Te doy suficiente tiempo para completar tus tareas?”
  • “¿Te funciona mi estilo de comunicación?”
  • “¿Qué necesitas de mí o de la empresa para superar los obstáculos que enfrentas?”

Confianza

Al darte tu nuevo cargo, la empresa confío en tus conocimientos, habilidades y logros. Una dinámica similar ocurre en la relación que asumes con tus dirigidos. Según Ravishankar, “las personas son contratadas porque son expertos en sus campos o muestran potencial para hacer un gran trabajo”. El problema surge cuando no les muestras confianza, ya que “puede hacerles sentir que no estás reconociendo las habilidades que los trajeron a la empresa en primer lugar”.

Una vez definidos los objetivos, dale a tu equipo el espacio para operar de acuerdo con las capacidades que tienen. El enfoque recomendado se puede resumir entonces de darle el beneficio de la duda. “Deseas crear un entorno en el que las personas se sientan lo suficientemente seguras como para experimentar, fallar, aprender de sus errores y crecer”, afirma la autora.

“Rituales”

Si asumes como gerente por primera vez, deberás hacerlo en un contexto en el que el trabajo híbrido ha ganado un espacio entre las empresas. Entre otras cosas, ello significa, nada menos, que lideres un equipo que no has conocido en persona, y/o incluso de otros país, con las diferencias culturales y de horario que ello implica.

En una entrada anterior resumimos cuatro recomendaciones para desarrollar una cultura de trabajo híbrido. Ravishankar, por su parte, rescata el trabajo de David Burkus. Él es un psicólogo organizacional que propone desarrollar “rituales” grupales que fomenten la camaradería en este tipo de equipos. Por ejemplo, destaca el “Meme Monday”, o “Memes de los lunes”, actividad en la que le “pides a todos los integrantes de tu equipo que compartan una imagen o gif rápido (y apropiado) que resuma cómo fue su fin de semana”.

Errores

En tu nuevo rol, serás responsable de encarar los errores o problemas como no cumplir una meta desde otra perspectiva. Se trata de una oportunidad para dejar atrás la búsqueda de culpas individuales, que puede alimentar una cultura laboral tóxica. “En cambio, adopta un enfoque de sistema para resolver el problema. Esto significa que consideras el problema como un todo y no en partes”.

Dicho de otro modo, la recomendación es cómo prevenir un error, “lo que contribuye en gran medida a promover la confianza en su equipo”.

Ayuda

Este nuevo camino en tu carrera no está exento de sentir ansiedad. Después de todo, se te exigirá más de ti. Enfrentado a esa situación, la alternativa es pedir ayuda, por ejemplo, a tus pares, mentores o tu superior. “Si bien puede parecer una tarea difícil cuando eres un nuevo líder, recuerda que no tienes que saberlo todo”.

Ravishankar resalta que no es un paso que debas dar solo por ti, sino que también por tu equipo, ya que “trabajar junto a alguien que está agotado puede afectar la productividad de tu equipo”.

Estos consejos se sumarán a una serie de nuevos aprendizajes que te demandarán paciencia y práctica para crecer en tu carrera profesional.