Todo parte con preguntarte dónde estás y a dónde quieres llegar. Luego fija tus objetivos de una manera específica, medible, alcanzable, razonable y dentro de un tiempo. Y no olvides establecer una forma de hacerte responsable de rendir cuentas de tu progreso.

Muchos partimos el año con ambición y con mucha energía de poder cumplir grandes metas y resultados. Así es como a medida que van pasando los meses y las responsabilidades, tanto laborales como personales, van creciendo, vemos como nuestra energía comienza a bajar y puede parecer que nuestros objetivos cada vez se ven más lejanos.

Si te sientes identificado con este escenario, aún estás a tiempo de reenfocarte en tus metas-objetivos de manera estratégica y sustentable. Recuerda que siempre tienes la oportunidad para volver a revisar tu plan y tomar acción hacia tus metas. 

Como bien dicen: “Al ponerle fecha a un sueño, se convierte en meta. Una meta dividida en pasos se convierte en un plan. Y un plan apoyado por acciones, se vuelve realidad.”

Para partir, dos preguntas

Para empezar, es bueno realizar el ejercicio de preguntarnos dónde estamos hoy y ser lo más sincero con nosotros mismos, poder anotar todo lo que se nos ocurre. Luego, preguntarnos dónde queremos estar y nuevamente anotar todo lo que se viene a nuestra mente.

Al tener esas dos respuestas es importante identificar las brechas que existen para poder generar un plan de acción para llegar a nuestra meta o metas.

Es importante dentro de este plan detectar qué tipo de metas te ayudan a tener un mejor rendimiento. Si son metas de resultados, metas a través de las que sólo puedas validar tus habilidades, metas que aumentan tus habilidades y competencias, o metas que reflejan tu último deseo como ser feliz, estar pleno, tener tranquilidad, etc.

Todos necesitamos sentir que estamos progresando de alguna manera para poder aumentar nuestra confianza y sentirnos plenos con lo que realizamos. Muchas veces no logramos bajar nuestras metas o sueños que tenemos por delante y puede parecer abrumador tener tantas expectativas de cumplirlos, pero no saber por dónde empezar. Para esto queremos compartirles la estrategia de objetivos inteligentes, o S.M.A.R.T. Goals, como se le conoce en inglés.

Esta estrategia te lleva a escribir tus metas y objetivos de una manera específica, medible, alcanzable, razonable y dentro de un tiempo.

Qué es S.M.A.R.T

  • Que tus metas sean específicas (specific): Siempre describir una acción concreta o número de lo que deseas obtener, por ejemplo, aumentar tis ventas en un 20%.
  • Tus metas deben ser medibles (measurable): Permite ver el progreso y realizar el seguimiento de lo que te propusiste. En el ejemplo anterior comentamos que quieres aumentar las ventas en un 20%, por lo que dicho objetivo se puede medir en comparación al año anterior. Que una meta sea medible es saber exactamente como lo medirás.
  • Tus metas deben ser alcanzables (achievable): Debes preguntarte si es posible alcanzar lo que te estás proponiendo. Esta pregunta tiene como respuesta un sí o un no. Si es un no debes identificar y modificar para que sí creas que es alcanzable. Es importante que la meta te desafié, pero que no creas que es imposible, ya que puede provocar que te des por vencido antes de tiempo. Así, es importante que creas que puedes lograrlo a través del progreso de tu plan.
  • Tus metas deben ser razonables (reasonable): Nos referimos a que debes preguntarte qué tan razonable es lo que propones que se puede lograr según tu tiempo, tus recursos y tus habilidades. Si crees que no es razonable debes volver a plantearte el objetivo para que sí se ajuste a tu contexto actual.
  • Tu meta debe tener una fecha (time): Te puedes preguntar cuándo exactamente quieres cumplir esta meta.

Para armar un plan según la meta que te propusiste puedes usar esta misma estrategia S.M.A.R.T. para evaluar mes a mes, o semana a semana, las mini metas o etapas necesarias para así cumplir tu meta final.

Un último paso que no está descrito en las siglas es tener accountability. ¿Qué significa esto? Consiste en trabajar con un coach sobre este plan para que así te sientas responsable de cumplir tus objetivos, o contarle al respecto a algún superior, amigo o familiar. Debe ser una persona con la que te sientas responsable de tener que rendirle cuenta para que así no te rindas antes de tiempo o te dejes estar con tus metas.

Si bien plantearte objetivos es solo el paso inicial para comenzar tu camino hacia la vida que quieres tener, es importante comenzar; nunca subestimes un primer pequeño paso. Si necesitas ayuda creando tu plan, en HK tenemos coaches especializados para acompañarte en el desarrollo de tu carrera y consultores expertos para el asesoramiento de tu equipo de alto rendimiento.

Fernanda Mackenna
Coach Liderazgo Energético
Equipo HK Human Capital